La enfermedad de Crohn es una enfermedad crónica que causa inflamación en parte del sistema digestivo.
Puede afectar a cualquier parte del tracto digestivo, pero con mayor frecuencia involucra al intestino delgado y al colon.
La enfermedad de Crohn puede desarrollarse en personas de cualquier edad, aunque es más probable que se desarrolle en personas de entre 20 a 29 años, también en personas que tienen un miembro de la familia con esta patología así como a los fumadores.
Los síntomas dependen de dónde ocurre la afección de la enfermedad, ya sea en el intestino delgado o grueso, así como su nivel de intensidad.
Entre los síntomas repentinos, que se pueden experimentar, destacan la diarrea prolongada, la pérdida de peso, fiebre, fatiga, dolor y sensibilidad en el vientre, así como el sangrado rectal.
Hay que indicar también que la enfermedad de Crohn causa dos tipos de complicaciones como las locales, que afectan solo a los intestinos y las sistémicas, que afectan a todo el cuerpo, también llamadas extraintestinales.
Por eso controlar los síntomas es importante para la salud a largo plazo.
Aunque no existe una cura definitiva para la enfermedad de Crohn, el tratamiento puede aliviar los síntomas y ayudar a disfrutar de una vida más plena, activa y gratificante.
Lo más importante es controlarla a largo plazo.
No existe un tratamiento generalizado que funcione para todos los pacientes y esto es debido a que cada paciente es muy diferente tanto en sus hábitos de vida como en sus circunstancias.
En cualquier caso, puedes contactar con nosotros sin compromiso, para disponer de información más detallada, de tu caso particular.